Vaya por delante mi respeto a su decisión de no coger la totalidad del permiso de maternidad que actualmente tenemos en España. A pesar de ello, no puedo dejar de opinar que ha hecho un flaco favor a las madres, y me explico. Con su determinación de disfrutar solamente de las seis primeras semanas, deja en muy mal lugar a todas aquellas mujeres, madres o no que pedimos que aumente el periodo de permiso, que nuestra legislación dispone para las madres. Sabemos que los países nórdicos son los más avanzados en este aspecto, haciendo posible que la madre esté presente en esa primera etapa tan importante en la vida de sus hijos, y que España, dentro de Europa ocupa los puestos de cola. Dicho ésto me concreto en su determinación, que me parece un tanto equivocada. Perdone si le parezco brusca, pero cuando se tienen bastante más años de los que Vd. tiene, y no porque me sienta en posesión de la verdad, si no porque la experiencia vivida enseña más que otras ciencias, se sabe que lo más importante es la familia que construimos y que los hijos, sobre todo en sus primeros meses de vida son prioritarios ante cualquier otra responsabilidad, llámese trabajo o política. Su actitud en este sentido me parece equivocada y si quiero pensar "mal" hace parecer a las mujeres que "disfrutan" de ese permiso unas egoístas y cómodas, cuando es todo lo contrario. Vd antepone su carrera política al bienestar de su hijo, Vd. no ayuda a las mujeres que reivindicamos estar más tiempo con nuestros hijos, a Vd se le llena la boca hablando de conciliación familiar y tira por tierra a las madres, Vd se cree imprescindible para que marche un pueblo, cuando lo que debería hacer es mirar para dentro de su casa y saber que el tiempo que no pase con su hijo es un tiempo perdido e irrecuperable. Criar a un hijo no es tenerlo atendido, es aportarle confianza, seguridad, cariño, darle referentes etc. No toco el tema de los padres, para los que también reivindico mayor permiso de paternidad, por no tener espacio. Sra. Presidenta tener un hijo es cosa de dos, y Vd., perdóneme no está donde debería estar.
martes, 22 de septiembre de 2015
domingo, 20 de septiembre de 2015
Hay veces, benditas veces, en las que un día normal puede transformarse en muy especial. En esta ocasión diré que maravilloso, y además de improviso, sin premeditación, lo cual añade ese toque de sorpresa , que lo engrandece aún más.No penséis que se trata de un acontecimiento espectacular o que me ha tocado la primitiva, nada de eso. Ha sido algo tan natural como el hecho de dar un paseo con mi nieto, su papa, su mamá y mi marido. Nos ha acompañado una mañana preciosa, con un sol luminoso que ha servido de marco al paseo.
Me vais a disculpar pero ver a mi nieto crecer es algo que todavía me enorgullece, por que veo en él las manos de unos padres entregados a disfrutar con inteligencia de su hijo. Desde muy pequeñito han sabido motivarlo para despertar en él la curiosidad por el mundo que lo rodea y que crecerá conforme él vaya siendo mayor. No es un niño caprichoso, es un niño alegre y sociable, que ya pese a lo pequeñito que es va tomando conciencia de quienes lo rodean. En él va cogiendo forma su personalidad y , aunque os parezca chocante, va entendiendo hasta donde puede tensar la cuerda con los mayores. Ya os digo que es todavía pequeño pero sé que el ía de mañana estará preparado para ser una persona acorde con su momento, sensible, cariñoso, divertido y muy inteligente, además de vitalista.
Estoy muy orgullosa y me siento muy feliz
Besitos
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