Hoy vuelvo a retomar mi blog, y a pesar de que el tema que voy a compartir es triste, os pido comprensión ya que es muy personal y posiblemente no sea entendido de la misma manera por aquellos que lo leais. Se trata de la pérdida que he sufrido hace apenas una semana: la muerte de mi querida perrita Lina. Ya os hable de ella en un anterior post, en el que os comentaba cuanto significaba para mí y lo viejita que estaba. Su pérdida no solo ha significado un vacio muy grande en mi alma, si no que también se han ido con ella muchos lazos que me unian a mi familia materna, ya que era la única que permanecía todavía conmigo de ella.
Su muerte casi entre mis brazos, se tradujo en una multitud de imágenes de muchos años atrás, con ella recordé momentos de mucha alegría y amor, recordé lo feliz que corría entre las flores y el cesped cada año, cuando venía de vacaciones a Chiclana, o cómo mi hija, entonces pequeña la vestía de "alta costura" y ella con una actitud placentera se dejaba hacer, !!lo bonita que estaba con aquellos vestidos!!, los momentos en los que al llegar a casa venía corriendo a saludarnos como si fuera el último dia, la fidelidad demostrada a mi madre cuando se quedo sola con ella y a media noche se levantaba al escuchar un ruido y se iba a buscarla para hacerle patente su apoyo, su personalidad y entrega. Sé y así lo prometí que siempre estaria conmigo, en mi corazón y pensamiento, que le había llegado el momento de volver a su familia de origen, aunque ello significara separarse de mí. Lina ha cambiado de sitio pero su recuerdo siempre estará sentado en mi falda como a ella le gustaba estar conmigo. Te querré por siempre amiga.